PRESENTACIÓN
La bodega SEDA LÍQUIDA, S.L. que fue fundada en 2015, aceptó el reto de elaborar sake de alta calidad, dentro de las más estrictas normas dictadas por los japoneses, consiguiendo una primera producción a finales de febrero de 2016.
Dicha bodega radica en el pequeño pueblo de Tuixent, situado en la vertiente sur de la Sierra del Cadí, en las estribaciones meridionales de los Pirineos de Lleida. Este municipio es conocido por la existencia ancestral de unas mujeres sabias, llamadas “Trementinaires”, que dominaban como nadie el arte de curar con las resinas, hierbas, setas i líquenes que solo se encuentran en estas tierras y está documentado que desde mediados del siglo XIX realizaban en pleno invierno largas travesías a pie por todo lo ancho y largo del territorio catalán y limítrofes, saltando de pueblo en pueblo, de mercado en mercado y de masía en masía, aliviando enfermedades y ayudando a los enfermos y necesitados con los ungüentos y tisanas que llevaban en sus alforjas.
Por ello y gracias a una fórmula secreta extraída de los elaboradores de vermut artesano del Priorat y con hierbas del Valle de las Trementinaires, la bodega SEDA LÍQUIDA ha elaborado un vermut muy especial, macerando dichas hierbas y especies con el sake que ellos mismos producen, en lugar del vino blanco como es habitual.
Este vermut que hemos bautizado como BERUMOTTO, se elabora en versión blanco y rojo y en formatos de 750 ml y de 200 ml.
En su composición intervienen 23 hierbas aromáticas (en realidad son más de 30) entre las que destacaré el ajenjo, el tomillo, el hisopo y la mejorana y entre 5 y 10 especias como el café, la canela o el anís estrellado.
NOTAS DE CATA
El BERUMOTTO rojo tiene un color dorado oscuro, siendo aromático, amaderado, especiado y agreste en nariz, mientras que en boca notamos un sabor muy especiado, amargo, quinado y ligeramente balsámico.
El BERUMOTTO blanco es de color amarillo pajizo o dorado suave y brillante. Su aroma recuerda la genciana así como una amplia paleta de hierbas silvestres. En boca notamos toda la amplitud de las botánicos y especias que lo conforman, al mismo tiempo que notamos un dulzor y amargor perfectamente equilibrados que se mantienen hasta el retrogusto.
MARIDAJE y TEMPERATURA DE SERVICIO
La temperatura ideal de servicio es muy fría, a unos 8ºC. Se recomienda presentarlo en un vaso old fashioned, con una o más aceitunas rellenas en el fondo y una piel de naranja en el caso del vermut rojo o una de limón o lima para el vermut blanco. Por ser una bebida muy fina y sutil no se recomienda añadir hielo a excepción de cubitos de acero inoxidable o de cobertura impermeable que eviten que se agüe la bebida.
Ambos vermuts son perfectos ejemplos de un aperitivo singular y que por tanto acompañaran adecuadamente los pequeños bocados de acompañamiento, sean salados, avinagrados o frituras.